Recipiente de uso microbiológico de forma circular de plástico cristalino, consta de dos placas una que funciona de tapa y otra de base. Diseñada para evitar la condensación al llenado y manejarse fácilmente, proveen una sujeción estable para apilarlas sin riesgo. Esterilizadas con rayos gamma. Fabricadas con poliestireno cristal virgen de grado médico
Medidas de seguridad para Caja de Petri:
Manejar con cuidado, material de riesgo y frágil como el vidrio. Almacenar en un lugar seco y fresco. Temperatura máxima para almacenaje en lugar cerrado y ventilado es de 35º C. Conservar la caja de empaque para cualquier reclamación. Estiba máxima de 18 cajas